Puede que no sea la bebida más deliciosa y que tenga un más que ligero sabor a tierra mojada, que manche de por vida todo lo que toca y que su color rojo deje unos inofensivos aunque cuando menos «curiosos» efectos secundarios en tu orina… pero el objetivo de este Post, es dejar bien claro los numerosos beneficios que tiene el zumo de remolacha para los atletas de resistencia; ciclistas, runners, crossfiteros, triatletas, etc.

 

¿Qué tiene de especial la Remolacha?.

El secreto está en su alto contenido de nitratos (NO3) que al poco tiempo de ser ingeridos provocan un aumento de nuestro nivel de nitritos (NO2) en sangre que dan lugar a la formación de óxido nítrico (NO).

Este último componente tiene dos efectos beneficiosos para los atletas de resistencia:

  • Provoca que los vasos sanguíneos se dilaten aumentando el flujo que riega los músculos y mejorando la contracción muscular.
  • Al mismo tiempo estimula las mitocondrias que se vuelven más eficientes (menos residuos en forma de protones), creando la misma energía pero consumiendo menos oxígeno.

O dicho de otro modo, para un nivel dado de esfuerzo, se da un menor consumo de oxígeno.

Es muy cierto que existen otros vegetales con gran contenido de nitratos como son las espinacas, el apio o las acelgas que presumiblemente tienen un efecto similar a la remolacha pero todavía no se han llevado a cabo estudios empleando estos otros vegetales.

Hasta el triatleta menos ducho se da cuenta de que los dos puntos arriba expuestos presentan una muy buena combinación de factores, como deja claramente demostrado el estudio que analizaremos a continuación llevado a cabo por Andy Jones, estrecho colaborador de la actual poseedora del record mundial de maratón femenino, Paula Radcliffe (2h 15min).

Pero antes de adentrarnos en los beneficios que tiene la remolacha, demos una vuelta por la otra parte del espectro.

 

 

¿Qué dicen sus detractores?.

Hay una creencia general de que los nitritos y los nitratos son dañinos para nuestra salud y que deberíamos limitar su consumo, veamos que hay de cierto en ello.

Nitratos (NO3):

Es un tipo de sales presente en casi todas las verduras con hojas comestibles así como también en la remolacha. El nitrato de sodio tiene propiedades antimicrobianas y por ello se usa como conservante alimenticio en carnes curadas o procesadas como las salchichas, embutidos o el bacon (E-251 y E-252).

Cuando se combina con las proteínas de este tipo de carnes (mioglobina) da lugar a las nitrosaminas las cuales (aunque parece que no hay un consenso total) pueden ser cancerígenas.

Como «dato tonto», decir que la formación de nitrosaminas es la responsable de que las salchichas intensifiquen su color cuando son cocinadas.

 

Nitritos (NO2):

Es un pariente cercano de los nitratos y también usado como conservante en ciertos alimentos pero han sido introducidos hace tiempo en la lista negra debido a que pueden favorecer la aparición de ciertos tipos de cáncer y otros problemas serios de salud.

La Organización Mundial de la Salud y otras asociaciones han marcado estrictos límites sobre la cantidad de nitritos que se pueden añadir en alimentos y aguas.

Es especialmente importante en bebés lactantes ya que su concentración de enzimas y antioxidantes es aún baja y un exceso de nitritos puede producir hipoxia (falta de oxígeno).

La clave de este asunto es que la aportación externa de nitratos y nitritos parece ser dañina excepto cuando son consumidos en su forma natural, presente en mayor o menor medida en casi todos los vegetales de hoja.

Las vitaminas C y D que encontramos en estos vegetales impiden que se formen las temidas nitrosaminas así que ya eres libre de consumir toda la remolacha y el apio que te de la gana.

Es muy importante mencionar que los nitritos de los que nos beneficiamos son los producidos de forma natural por nuestro cuerpo al recibir una cantidad extra de nitratos (procedentes de la remolacha), pero el consumo directo de nitritos es muy tóxico y ya se han observado varios casos de intoxicaciones en deportistas por su mal uso.

 

 

DATOS Y MÁS DATOS…!

Vamos a analizar el experimento realizado por el Doctor Andy Jones, Catedrático de Fisiología Aplicada en el Departamento de Ciencias del Deporte y de la Salud y Asistente del DVC de Innovación y Negocios. El profesor Jones es reconocido internacionalmente por su investigación en las siguientes áreas: 1) control y limitaciones del metabolismo oxidativo del músculo esquelético; 2) causas de intolerancia al ejercicio en salud y enfermedad; 3) fisiología respiratoria, en particular la cinética del intercambio de gases pulmonares y la ventilación durante y después del ejercicio; y 4) fisiología y nutrición del rendimiento deportivo, particularmente en relación con el atletismo de resistencia. El profesor Jones es autor de más de 300 artículos originales de investigación y revisión y es coeditor de tres libros. Es miembro del Colegio Americano de Medicina del Deporte, la Asociación Británica de Ciencias del Deporte y el Ejercicio, el Colegio Europeo de Ciencias del Deporte y la Sociedad Fisiológica. Jones es editor en jefe del European Journal of Sport Science y es miembro del consejo editorial de otras seis revistas internacionales de medicina deportiva y ciencias del ejercicio. El profesor Jones ha actuado como consultor de varios órganos rectores de empresas deportivas o comerciales, como UK Athletics, el English Institute of Sport, Gatorade Sports Science Institute y Nike Inc.

La muestra inicial se compone de 9 ciclistas, todos pertenecientes a clubes ciclistas de alto nivel. Se divide a esos 9 sujetos en dos grupos:

– Al primer grupo se les da 0.5 litros de zumo de remolacha natural (con un contenido medio de nitratos de 300 mg) y al segundo grupo se les da la misma cantidad de zumo con el mismo sabor, mismo color pero al que se le había extraído todos los nitratos. Un placebo.

– Dos horas y media más tarde y tras realizar un calentamiento apropiado, todos los sujetos son sometidos a dos pruebas contrarreloj, una de 4 km y otra de 16 km a máximo esfuerzo.

– Un par de días más tarde se realiza exactamente el mismo experimento pero intercambiando a los ciclistas de grupo.

 

Esto es lo que se pudo observar:

  • Los ciclistas que tomaron zumo de remolacha con nitratos consiguieron reducir su tiempo total un 2.8% en la prueba de 4 km y 2.7% durante la de 16 km.
  • El consumo de oxígeno no se vio alterado en ninguno de los dos grupos a pesar de que su potencia media aumentó del 7-11% lo que nos lleva a afirmar que el zumo de remolacha incrementa la potencia entregada para un nivel dado de VO2
  • La presión sanguínea sistólica en reposo (cuando el corazón late) se vio reducida mientras no se observó ningún efecto sobre la diastólica (cuando el corazón se relaja tras el latido).
  • La mejora en el rendimiento fue inversamente proporcional al estado de forma del ciclista, esto quiere decir que los ciclistas más fuertes notaron en menor medida los efectos positivos del zumo.
  • El zumo de remolacha aporta efectos bastante más pronunciados en eventos cortos, con una duración de 5 a 30 minutos como puede ser un 5k o 10k para los corredores más rápidos. Esto es debido a que los beneficios son más notables en niveles máximos de VO2 pero no tanto a niveles medios.
  • Otras fuentes indican que el efecto del zumo se reduce en distancias más largas y se ha estimado que en una contrarreloj de 80 km se obtiene una mejora en el tiempo total del 0.8% (sin incrementar ni duplicar la ingesta) lo que en el experimento equivaldría a restar 1 min y 20 seg al crono en 40km de contrarreloj.
  • Hay que tener en cuenta que durante el estudio no se aportó una segunda dosis a los ciclistas por lo que no se sabe si esos efectos beneficiosos se podrían mantener en el tiempo más allá de los 30 min. Existen incluso mini dosis de concentrado de remolacha como la de la imagen de abajo, que serían perfectos para pruebas de larga distancia. Así se evitan los problemas de correr con gran cantidad de líquido en el estómago.
  • El estudio de Andy Jones se basa exclusivamente en el rendimiento en deportes individuales. Hay poca información sobre el efecto del zumo de remolacha en deportes más explosivos como fútbol o baloncesto pero algunos equipos profesionales lo empiezan a usar de forma regular con sus jugadores.
  • Durante las Olimpiadas de Londres 2012, era una misión casi imposible encontrar zumo de remolacha en todo Londres y alrededores ya que casi todas las delegaciones de los diferentes países estaban buscando donde comprar el preciado líquido rojo con sabor a tierra. Por algo será.

El beneficio parece ser evidente e incluso en algunos artículos lo llegan a mencionar como una forma legal de dopping (ver post Remolacha: la EPO natural).

Si tomo zumo de remolacha, ¿iré más rápido?.

Parece ser que la cantidad ideal es entre 500ml de zumo natural ya que a partir de ahí, las ganancias marginales en el rendimiento deportivo decrecen y pueden dar paso a efectos colaterales indeseados como malestar gástrico.

En este sentido y para evitar las molestias, nuestro concentrado de remolacha aportaría los mismos beneficios pero evitando el malestar de estómago que puede aparecer si bebes gran cantidad de zumo.

A diferencia de los jugos disponibles comercialmente, cuyo contenido de nitrato normalmente fluctúa mucho, nuestro corazón de remolacha BIO Rüben Herz ofrece un contenido de nitrato estandarizado de aproximadamente 600 mg por cada toma de nuestro sobre de 100ml.   Esto, se logra mediante el cultivo de una variedad de remolacha conocida como “vieja”, que de manera natural es particularmente rica en nitrato y que gracias al proceso de extracción lenta, el jugo de remolacha se concentra de manera que nuestro corazón de remolacha orgánico de 100 ml, corresponde aproximadamente a  400-500 ml de jugo de remolacha “clásico”. Con certificado Europeo BIO – AT 301, garantiza que nuestro producto es totalmente natural sin aditivos ni azúcares añadidos.

 

¿Nos afecta a todos por igual?.

Si analizamos los beneficios que nos aporta la remolacha; mejora la circulación sanguínea y una mayor eficiencia de las mitocondrias, vemos que son habilidades ya de por sí muy desarrolladas en los atletas más entrenados de ahí que su margen de mejora sea menor que en los atletas ocasionales.

Como en todo en la vida, a donde llegas depende mucho de desde donde empieces.

La mejoría puede ser enorme si pasas de usar una BH de paseo a una Cervelo P5 pero no tanta si tu vieja bicicleta era una Cervelo P2.

Pero aún si la mejora se viese reducida a un mísero 0.1% en atletas olímpicos, creo que valdría la pena ya que no supone ningún esfuerzo extra tomarse un vaso de zumo y muchas veces las competiciones se deciden por márgenes mínimos.

Que se lo digan a Laurent Fignon que tras 3 semanas de carrera perdió el Tour de Francia de 1989 en la última etapa por solamente 8 segundos frente a Greg Lemond.

Por cierto, se cree que si Fignon hubiese usado casco aero y el manillar de triatleta como hizo Lemond, habría cruzado la meta en los Campos Eliseos 29 segundos antes, más que suficiente para ganar el que habría sido su tercer Tour de Francia.

 

 

Si eres TRIATLETA y vas a la piscina; ¿cómo interfiere el cloro en la remolacha?.

En el experimento arriba referido de Andy Jones, se observó que los 3 individuos en los que menor efecto tuvo el zumo de remolacha eran los únicos triatletas del grupo.

Esta menor influencia se cree debida a la mayor exposición al cloro y otros desinfectantes presentes en la piscina en comparación con alguien que se dedica a correr o al ciclismo en exclusiva.

Parece increíble pero la conversión y asimilación de los nitratos contenidos en la remolacha comienza ya en tu boca con tu saliva. La microflora de tu lengua se encarga de convertir aproximadamente un cuarto de esos nitratos directamente en nitritos que son ingeridos.

Estos llegan a tu estómago donde serán reducidos a óxido nítrico (NO) al interactuar con los jugos gástricos.

 

En caso de que frecuentes la piscina, al nadar es muy común que el agua entre en tu boca y se ha demostrado que el cloro reduce la flora bacteriana que reside en la lengua del mismo modo que lo hace el enjuague bucal.

Por lo tanto si eres triatleta ya tienes otro motivo más para darle duro a la remolacha e ir perdiendo ese miedo que tienes a nadar en aguas abiertas.

 

 

 

 

Fuente: Swim, Bike, Write.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies